Nada menos arbitrario que esta alucinante sucesión de divinidades

Cada imagen cambia, se funde a su contraria, se desprende, forma otra imagen, se une de nuevo a otra y, al fin, vuelve al punto de partida. El ritmo es el agente del cambio. Las expresiones privilegiadas del cambio son, como en la poesía, la metamorfosis; como en el rito, la máscara. Los dioses son metáforas del ritmo cósmico

(...) Nada menos arbitrario que esta alucinante sucesión de divinidades.

Encarnaciones de un más allá inaccesible, las representaciones de los dioses son terribles. En otra parte, sin embargo, he tratado de distinguir entre el carácter aterrador del numen y la experiencia, acaso más profunda, del horror sagrado. Lo tremendo y terrible son atributos del poder divino, de su autoridad y soberbia. Pero el núcleo de la divinidad es su misterio, su otredad radical. Ahora bien, la otredad propiamente dicha no produce temor sino fascinación. Es una experiencia repulsiva o, más exactamente, revulsiva: consiste en un abrir las entrañas del cosmos, mostrar que los órganos de la gestación son también los de la destrucción y que, desde cierto punto de vista (el de la divinidad), vida y muerte son lo mismo.

(...) el dios es una presencia total que es una ausencia sin fondo.

Cada máscara, un nombre; cada nombre una fecha. Me llamo tiempo y agito una sonaja de barro con siete semillas



Octavio Paz, "Risa y penitencia" se publicó en Puertas al campo, México, Universidad Nacional Autónoma de México. 1966.


seguir leyendo: http://patriciadamiano.blogspot.com/2009/05/octavio-paz-risa-y-penitencia.html

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2 comentarios:

El Poeta Maldito dijo...

Es increíble como vamos descubriendo estas similitudes de caracteríscticas entre la vida y la poesía, esto de los cambios para activar una creación, para poner al mundo en movimiento. Y como a veces las situaciones de la vida o las experiencias nos terminan formando un oxímoron, como esto de: "el dios es una presencia total que es una ausencia sin fondo"

Fascinante

-> dijo...

es muy genial, acá se puede leer entero (y también hay otro texto de Paz, que es un genio):

http://patriciadamiano.blogspot.com/2009/05/octavio-paz-risa-y-penitencia.html

abrazo!